La apuesta del Gobierno anterio ha sido, desde luego, decepcionante en cuanto a su interés por la defensa de las energías renovables. Está bien que se tenga en cuenta que los gastos de inversión para las empresas interesadas se han reducido considerablemente como consecuencia de la imparable investigación tecnológica. Pero aprovechando esta situación debería apostar por superar los propios compromisos adquiridos con la Unión Europea. No necesariamente debe darse por satisfecho. Ahí tenemos el ejemplo de Alemania que sigue incrementando su inversión.
El sol nos sale gratis y las fuentes energéticas derivadas del petróleo por supuesto que no.
Ya veremos como se comporta el nuevo gobierno. Lo más fácil seguir con la dinámica anterior. Siempre tendrá la escusa de que lo iniciaron otros.
Sí, yo me imagino que el nuevo gobierno va a tomar la posición más cómoda; esa que tú comentas de escudarsse en la regulación jurídica aprobada por un ejecutivo anterior. El nuevo Presidente tiene asuntos muy trascendentes como para tener que ocuparse de esta pequeñez de las placas solares.
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